Una vez la mujer ha entrado en la etapa de la menopausia, que generalmente es entre los 45 y los 55 años, el sangrado ha de dejar de existir completamente. A partir de un año después del último sangrado, ya no es normal tener flujos de sangre vaginal. Si pasa esto, aunque sea sólo una mancha, no nos tenemos que asustar pero sí que debemos ponernos en contacto con el especialista. En Ginecólogos Granollers la informaremos de si se trata de un síntoma normal de la menopausia o bien se trata del signo de un problema, y también la acompañaremos en el tratamiento que sea necesario.
El sangrado durante la menopausia puede tener diferentes orígenes: por atrofia vulgar, que puede producir pérdida de sangre por sequedad y erosiones. Puede haber una herida a nivel vaginal o también procedente del cuello del útero. De otro lado, con la menopausia la disminución de la producción de hormonas femeninas, los estrógenos, provoca la reducción del endometrio, el tejido mucosos que recubre el interior del útero, que se hace más fino y frágil. Esta atrofia endometrial puede provocar algún tipo de sangrado anormal. Todavía dentro del útero, la aparición de pólipos benignos en el interior o bien en el cuello o canal del útero también pueden hacer que haya algún flujo sanguíneo. La mayoría de las causas del sangrado son benignas, pero el cáncer de endometrio también se puede manifestar por primera vez con un sangrado. De hecho, hasta un 20% de las pacientes que sangran en la menopausia lo hacen a causa de un cáncer de endometrio. Por este motivo es muy importante descartar que se trate de un cáncer y no pasar por alto ningún sangrado a partir de la menopausia.
En su visita, el especialista le hará una historia clínica completa y una exploración ginecológica. También le hará una ecografía para valorar las características del útero y medir el tamaño del endometrio. También se puede hacer una biopsia de endometrio, para extraer una muestra y analizarla. Para explorar el útero con más detalle también hay la posibilidad de hacer una histeroscopia. En caso que sea necesario, en Ginecólogos Granollers le aconsejaremos el tratamiento más adecuado, pero recuerde que es muy importante poderlo tratar lo antes posible, de aquí la importancia de acudir al médico especialista en seguida que haya sangrado. En caso de atrofia, lo más habitual es utilizar cremas con estrógenos locales, siempre que no haya contraindicaciones a su uso. La extirpación y la cirugía están recomendadas en caso de pólipos y tumores malignos.