El embarazo implica una transformación del cuerpo de la mujer, tanto para alimentar y tener cuidado del feto durante la gestación como para prepararse para el momento del parto y para la lactancia. Y una vez ha pasado el parto, la atención continuada al pequeño, sobre todo en los primeros meses de vida, hace que el retorno a las condiciones físicas previas de la mujer sea -también- un proceso lento y que necesite hacer su camino. No es recomendable obsesionarse para volver al peso anterior al embarazo, y más si la mujer opta por dar el pecho. Pero igualmente hace falta mantener una vida activa y una dieta al máximo de equilibrada.
En este sentido, la mujer lo puede tener más fácil si durante el embarazo ya se ha ido preparando para el post-parto. Andar y hacer actividad física acompañado de una dieta sana y pensada para la mamá y el futuro bebé, son una buena semilla para que una vez haya pasado el parto la mujer pueda recuperar más rápidamente la situación anterior de peso y condición física.
Referente a la actividad física y deportiva, es necesario moverse des del primer día que se llega a casa después del parto. Si no hay ningún motivo médico que lo impida, aunque sea por poco rato se debe hacer ejercicio cada día, poco a poco, e irlo aumentando de forma gradual. Es muy importante que sea progresivo y adaptado a la situación de cada cuerpo. En el caso de la lactancia, el cansancio puede ser más acusado y se debe tener en cuenta. Sea como fuere, los especialistas pueden recomendar el mejor tipo de ejercicios, ya sean generales o bien específicos como los de recuperación del suelo pélvico mediante hipopresivos. También hay centros deportivos con programas especialmente diseñados para que las mamás puedan hacer deporte con sus bebés.
La dieta es muy importante en todas las etapas de nuestra vida. Pero en este caso se debe tener muy presente que todo aquello que come, la mujer la transfiere al bebé durante el embarazo, y posteriormente a través de la leche materna. Así pues, la recomendación para que el cuerpo de la mujer recupere el peso previo al embarazo es seguir una dieta variada y equilibrada, con fruta, verdura y proteína, y que aporte todos los nutrientes necesarios. En el caso de la lactancia es habitual tener más sed, ya que el cuerpo necesita más líquido para generar leche.
Finalmente, y aunque a menudo sea muy difícil o hasta parezca imposible, la madre debe intentar descansar al máximo de horas posibles. Y una forma de hacerlo es ponerse a dormir cuando el pequeño duerme, ya que cuando esté despierto será del todo imposible.